lunes, 2 de marzo de 2020

Pueblos Originarios en El Alto antes de El Alto


Por: Ángel Cahuapaza Mamani (Historiador)
El territorio altiplanicie de actual ciudad de El Alto fue punto estratégico y de contacto entre los primeros asentamientos de pueblos andinos. Este punto de transito obligado, desde siglos fue conexión permanente de los primeros pobladores circundantes a El Alto y la actual La Paz.

Territorio de El Alto como punto de transito obligado (foto aprox. años 40's)
Los asentamientos humanos en la región de la actual ciudad de La Paz, se encuentran desde el año 1.500 a. de C., hasta el año 100 después d C. Este periodo en términos de la arqueología es denominado como Formativo.

Unos linderos idealizados de Pacasa vistos desde Cantapa (Pärssinen, 2005: 238)
Trazado y identificación de El Alto (Ángel Cahuapaza, 2018)
Este periodo se presenta en los valles como Achocalla y en la zona de Pampahasi, donde encontraron evidencia material visualizados en material cerámico, lítico y construcciones domésticas. El tipo de material encontrado correspondería a Chiripa Tardío para el caso de Achocalla. En el caso de Pampahasi no muestran mayores datos al respecto, salvo que aparentemente el material encontrado por el proyecto pertenece a Chiripa Medio.
Ubicación actual de El Alto
En ese sentido, los primeros asentamientos de pobladores se realizaron en el sector de la actual Achocalla (circundante a El Alto), y Pampahasi (circundante a la ciudad de La Paz), donde se encontró material cerámico y construcciones domesticas que pertenecen a la cultura Chiripa del periodo formativo (1.500 a. de C.- 100 d C.). De la misma forma, estudios señalan que los asentamientos circundantes al espacio territorial del Valle de La Paz (actual ciudad de La Paz), fueron Chiripa y Wankarani.
Cultura Tiwanaku
 Asimismo, la cultura Tiwanaku fue otra de las culturas de las cuales se tienen evidencias en proximidades del valle de Chuquiapo. La influencia de Tiwanaku (400 – 1050 d. C.) fue visible por la proximidad de su capital política y religiosa y por las diferentes materias primas del valle tales como oro, coca, maíz, madera, etc. Así mismo, Tiwanaku en el Horizonte Medio de años 100 a.C. a 1.100 d.C. fue hegemónica y la correlación con distintas culturas varía según la región.  Se evidencia esta relación a través de la presencia de centros ceremoniales y de la cultura material, como son los objetos de prestigio y rituales (tazones, kerus, y objetos ceremoniales fabricados en oro y cobre como pecheras, diademas, brazaletes entre otros) hallados en los distintos asentamientos presentes en la actual urbe paceña que fueron los vehículos culturales de prestigio Los sitios reportados para este periodo se hallan representados en los barrios de Pampahasi, Miraflores, Sopocachi, (anco-anco), Llojeta, Achumani, entre otros. Cuando Tiwanaku tuvo su misteriosa desaparición, la región quedo desierta, ocasionando migraciones a varias regiones, entre ellas al valle de Chuquiapo.
La cultura aymara y/o señoríos aymaras, también tienen sus asentamientos próximos al valle de Chuquiapo en los años 1.100 d.C. hasta 1.400 d.C.  Antes de la implantación de los Incas en el Collao, la población aymara, repartida en varios señoríos, constituía la etnia dominante tanto desde un punto de vista numérico como político. Según los resultados de la visita de Toledo (1575), ésta representaba un 70% de la población total del Collao, o sea aproximadamente unas 260.000 personas.
Señorios Aymaras según Luis Capoche
La parte del Collasuyu, que es la del Collao, que está poblada de las naciones contenidas en las capitanías, se dividían en dos bandos, que llamaron Urcusuyu y Umasuyu, que quiere decir (lo primero) gente que habita en los altos de los cerros, que tienen este nombre urcu, y los umsasuyu en lo bajo y llano, riberas de las aguas que en esta lengua llaman uma, otros dicen que significan los urcusuyus gente varonil y esforzada, porque por este nombre de urcu se entiende lo masculino, y los umasuyus (lo) femenino.


Con respecto a la localización territorial de los grupos de urcosuyu y umasuyu, según lista proveída por Luis Capoche sobre los registro de mitayos potosinos, se realiza la repartición de los señoríos aymaras según la división urco/uma, como ser: Urcosuyu ( Canchis, Canas, Collas, Lupacas, Pacajes, Carangas, Quillacas, Caracaras; y Umasuyu (Canchis, Canas, Collas, Pacajes, Soras, Charcas, Chuis, Chichas.
Chullpares aymaras en Achocalla
Las Chullpas, que son grandes construcciones funerarias, reflejan la presencia de la cultura aymara de Pacasa (Pacajes) en el territorio del valle de Chuquiabo. La cultura material se encuentra en la presencia de restos cerámicos correspondientes a fragmentos  de ollas, cantaros, jarrones, y artefactos que, fueron hallados en Villa Pabón, Plaza Carrasco, y San francisco, además de los valles aledaños como es el caso de Achocalla, en el sector conocido como Chullpani
La presencia Inka entre los años 1.400 d.C. a 1.500. d C., tuvo el territorio denominado Tawantinsuyu, que conformaban los cuatro suyus: Chinchaysuyu, Contisuyu, Antisuyu, y Collasuyu. La región del valle de Chuquiapo, asentada por el señorío de Pacasa pertenecía al Collasuyu.
Al parecer, en la primera mitad del siglo XV, tanto Inka Viracocha como Pachakuti Inka buscaban alianzas con el señorío Colla y el señorío Lupaca. No obstante, una vez Pachakuti había ganado los conflictos internos de Cuzco (1438), conquisto tanto Lupaca como Colla y también Pacasa, el tercer señorío de la entidad nuclear que conocemos con el nombre de Collao. Hacia finales de Tawantinsuyu, cada uno de estos señoríos contaba entre 20.000 hombres a. unos 100.000 habitantes.

Metales preciosos Inka (Museo de Oro - La Paz)
Por lo tanto, los Inkas tienen registro de presencia en el valle de Chuquiapo, por medio de los restos arqueológicos visualizados en la cultura material como por ejemplo: Aribalos, platos, cuencos y restos de material áurico, y los restos de cultura material hallados en los sitios aledaños a San Francisco, Chasquipampa, Sopocachi y Chuquiaguillo.
En consecuencia, podríamos decir que el actual territorio de El Alto fue punto fundamental de tránsito para las culturas Chiripa, Wankarani, Tiwanaku, Aymaras (Pacajes), e Inkas (Collasuyu - Valle de Chuquiapo), ya sean para el intercambio de objetos o el comercio posteriormente.